TECNOLOGÍA
¿TE ENOJAS? TU CEREBRO TE LO AGRADECE
“El enojo es una reacción que tiene el sistema nervioso central para manifestarse, estar en contra, evadir algún tipo de molestia y obtener algún beneficio. De hecho, llevado a cabo adecuadamente nos hace competitivos, y por eso resulta benéfico”, dijo Eduardo Calixto González, académico de la Facultad de Psicología de la UNAM.
De acuerdo con el especialista el enojo libera noradrenalina (hormona que aumenta la presión arterial y el ritmo cardíaco) y dopamina, al mismo tiempo que glutamato y se da una disminución de los niveles de serotonina y vasopresina.
A diferencia del enamoramiento, este cambio neuroquímico se da de inmediato. “Prácticamente se anula la parte más lógica y congruente del cerebro para incrementar la actividad cardiovascular y respiratoria”, apuntó Calixto González.
Así, el enojo logra que el individuo se prepare para la lucha o para la huida, donde se incrementan los procesos memorísticos inmediatamente, acotó el también jefe del Departamento de Neurobiología de la Dirección de Investigaciones de Neurociencias del Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente.
“Al mismo tiempo, nos engañan con menor facilidad y atendemos con mayor detalle algunos objetos que en un momento dado no se darían”.
Para el investigador, es normal enojarse por 30 o 40 minutos y resulta benéfico porque nos vuelve competitivos, pero cuando dura más de cuatro horas entonces se vuelve patológico y es nocivo para el cerebro.
Hoy sabemos que en la segunda etapa del enojo se da un incremento de los niveles séricos de cortisol, una hormona relacionada con el estrés, y el cambio de glucosa a nivel plasmático. De hecho, el cortisol buscará adaptarnos bajo ciertas condiciones, y en consecuencia, el enojo es una respuesta funcional del sistema nervioso central.
Cuando las personas son jóvenes el enojo resulta más fuerte y de mayor intensidad que después de los 35 o 40 años, donde el sentimiento es más selectivo y se controla en un periodo de tiempo más corto.
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NASA y Space X trabajarán para volver a la EEI la próxima semana
La NASA y Space X anunciaron que tendrán una nueva fecha de lanzamiento de su próxima misión tripulada a la Estación Espacial Internacional (EEI), la misión será realizada por el Crew-4, que ahora tiene previsto su despegue el próximo 23 de abril, desde el Centro Espacial Kennedy, Florida (EU).
La misión Crew-4 esta compuesta por los astronautas de la NASA Kjell Lindgren, quien será el comandante de la nave, Bob Hines y Jessica Watkins, así como la italiana Samantha Cristoforetti, de la Agencia Espacial Europea (ESA).
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Científicos de la NASA registran al “cometa más grande jamás visto”
Un cometa con un núcleo 50 veces más grande de lo normal puede pasar cerca de la Tierra a 35,000 kilómetros por hora. El telescopio Hubble de la NASA determinó que el núcleo helado del cometa tiene una masa de alrededor de 500 billones de toneladas y tiene 137 km de ancho, haciéndolo más grande que el estado estadounidense de Rhode Island.
Aunque pase cerca de la tierra, tendrá una distancia de 1.600 millones de kilómetros del Sol y no será que pase a través de nuestro Sistema Solar sino hasta el 2031.
Fue visto por primera vez en el 2010, pero solo hasta este 2022 que el Hubble confirmó su existencia y que es el más grande que cualquier otro visto antes.
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El Zika puede mutar, científicos advierten del peligro
Un grupo de científicos descubrió que el virus del Zika puede mutar en uno más infecciosos y potencialmente romper la inmunidad preexistente. Los responsables de este trabajo publicado en la revista “Cell Reports” son los investigadores del Instituto de Inmunología de La Jolla en California y de la Universidad de Texas.
Este virus es transportado por mosquitos y los síntomas de la infección suelen ser leves en los adultos. Sin embargo, el virus puede infectar a un feto en desarrollo, lo que puede provocar defectos de nacimiento como la microcefalia.
El Zika y el dengue coinciden en muchos países del mundo y ambos comparten muchas propiedades biológicas; de hecho, los virus son lo suficientemente similares como para que la respuesta inmunitaria provocada por la exposición previa al dengue pueda ofrecer protección contra el Zika.