Apple se está preparando para celebrar este próximo miércoles un evento por todo lo alto en el que veremos, con seguridad, la próxima generación de iPhone y de Apple Watch, los dispositivos más portátiles de Apple. Sin embargo, antes de que acabe el año es imperativo que antes de final de año lleguen también la renovación de los iPad Pro, de los MacBook y del Mac mini, algo que puede ocurrir en la presentación de este día 12 de septiembre o en un evento celebrado más adelante.

Algunos de los detalles de estos terminales ya se han ido conociendo durante los pasados meses, el conocido analista Ming-Chi Kuo da más datos acerca de cuáles podrían ser las intenciones de Apple con estos terminales. Entre los nuevos datos, hay uno que llama poderosamente la atención por lo que podría significar.

Concretamente, se trata de la afirmación según la cual los nuevos iPad Pro sustituirían el puerto de conexión Lightning, que encontramos también en el iPhone y accesorios como los AirPods o los periféricos de la compañía, por uno USB de tipo C. Este se encuentra ya presente en los MacBook y MacBook Pro de manera exclusiva, y está particularmente extendido ya en los teléfonos y dispositivos de otros fabricantes, haciendo que su uso alrededor del mundo se encuentre en pleno crecimiento.

Sería la primera vez que este puerto es trasladado a las tabletas de la compañía, en un movimiento que dejaría al iPhone de manera exclusiva como producto de relevancia en términos de volumen de comercialización con el puerto Lightning. Este movimiento, que supondría la inclusión de un nuevo cargador de 18W con los nuevos iPad Pro, abre una ventana hacia una posible futura extinción del conector propietario de Apple.

Además de esto, los nuevos iPad Pro incluirían el ya vastamente rumoreado Face ID para permitir el desbloqueo facial del terminal.

Respecto al segmento de los ordenadores, Kuo apuesta por un MacBook más barato que los actuales –con la desaparición de la línea Air, suponemos– para ayudar a incrementar las ventas de los modelos base. Este conservaría un diseño similar al actual, pero no aporta datos acerca de si la pantalla mantendrá el mismo tamaño (12 pulgadas) o se verá incrementada hasta las 13 pulgadas, tal y como apuntan varios rumores.

Como añadido, incorporará Touch ID, el lector de huellas dactilares, como método de desbloqueo del aparato. Este lo encontramos presente ya en los MacBook Pro con Touch Bar, llegando en este caso sin dicha barra táctil.